sábado, 30 de mayo de 2009

¡Cuide su salud mental!


¡ALARMA!

Mítines políticos pueden causar “Influenzia Mental” de tipo electoral

*Científicos aseguran que las campañas elctorales pueden producir “Influenzia Mental” en las personas.
*Recomiendan acudir a los mítines con “cubre orejas” pues muchas de las propuestas traen el virus de la demagogia.

Científicos de origen desconocido aseguraron que asistir a las campañas políticas, sin importar el candidato ni el partido político al que éste pertenezca, puede ocasionar entre la concurrencia “Influenzia Mental” de tipo electoral sin que se “cepa” el momento exacto del contagio.
Los descubridores de esta nueva epidemia, aunque en México la “Influenzia Mental” es una endemia que se ha sufrido por años, dicen que esta enfermedad principalmente es originada por las propuestas que traen consigo el “virus de la demagogia” y que los candidatos lanzan al aire libre con su voz estrepitosa modulada en el canal de la sinceridad.
En un vehemente estudio que los científicos realizaron en al menos 100 personas que acudieron toda una semana entera a los mítines, descubrieron que estas gentes presentaban los síntomas característicos de la “Influenzia Mental”.
Los síntomas que presentaron las personas estudiadas por los científicos eran: fiebre aguda -o febrilidad de cambio imaginario- por las propuestas que los candidatos formularon en sus giras así como también dolor de cabeza al descubrir que esas propuestas no serán jamás cumplidas.
Otro síntoma que también se manifestó en los personas fue dolor de músculos a causa de los aplausos que constantemente otorgan al candidato en turno cada que hace una pausa en su soporífero discurso.
Por todo esto, los científicos instan a todos los mexicanos que al acudir a las campañas electorales usen “cubre orejas” para evitar ser contagiados por la “Influenzia Mental” de tipo electoral.

lunes, 25 de mayo de 2009

DIAGOLOS APOLITICOS


El cuarto distrito quiere algo más nutritivo que las despensas.

“La política es el arte de buscar
problemas, encontrarlos, hacer un
diagnostico equivocado y aplicar
después los remedios equivocados”
Groucho Marx.

Asustados están todos los candidatos del cuarto distrito pues ha emergido un nuevo candidato que cada vez más personas simpatizan con él y que atenta con ganar las próximas elecciones: el ABSTENCIONISMO.
Muchos de los candidatos han expresado su desasosiego pues en sus recorridos proselitistas por los diferentes sectores de la localidad se han dado cuenta una realidad ineludible: fueron sus antecesores y ellos mismos los que por sus parcos resultados en las acciones de bienestar social han posicionado al abstencionismo como el candidato predilecto.
Actualmente las encuestas preconizan que el ganador avasallante de las elecciones del 5 de Julio será un candidato que no ha sido registrado por ningún partido político, las encuestas demuestran que aparecido un verdadero opositor.
Éste nuevo opositor de la política del acarreado para ganar y el aplauso para detonar la apoteosis de un discurso no cuenta con vida propia, es resultado de la sinergia de las multitudes decepcionadas que lo han dotado de existencia, es la conciencia colectiva, que paulatinamente ha ido despertando, la que ha logrado que el abstencionismo pase de ser un simple palabra ha convertirse en un hecho.
Ahora el abstencionismo es un monstruo que ronda sobre las urnas y ha puesto a temblar los pilares del sufragio, ahora es un espectro que se mete por las narices encubándose en el pensamiento y sopesando en el actuar; mañana será el que triunfe y sea el verdadero presidente, gobernante, senador y diputado de los mexicanos.
Y es que los años no pasan en balde, el colectivo social tiene memoria aún y a pesar de que la política que se elabora en nuestro país sea desmemoriada y quiera esconderlo todo con simples enunciados de cambios en sus estructuras no podrá volver a tener credibilidad, si es que alguna vez la tuvo.
La sociedad recuerda nítidamente cuando pasó por aquellas calles, arropado por un símbolo partidista, ese político humilde pidiendo su apoyo para realizar grandes cambios solicitando determinado tiempo para cumplir tal o cual promesa, tiempo que nunca llegó.
Ahora la gente ha envejecido, si bien no madurado, y en la espera de ese ansiado cambio se ha dado cuenta de que el verdadero trasfondo de la política y los que actúan dentro de ella es construir un andamiaje para llegar a tocar la cúpula del poder y acrecentar su capital político.
De ahí que el rechazo de las masas populares hacia los que hacen la política se vaya tornando vigoroso, de ahí que los partidos políticos estén siendo condenados al ostracismo.
Difícilmente el abstencionismo desperecerá por que hasta hoy ningún candidato se ha dado cuenta que el cuarto distrito, y todo el país, quiere algo más nutritivo que las despensas, algo más duradero y beneficioso que un vaso con su rostro, algo menos efímero que 500 pesos por su voto.